miércoles, 19 de marzo de 2014

Atención Primaria, sostenible vs creíble


Estamos acostumbrados a oir frases como: "yo si voy, voy al especialista, porque para que el de familia me maree, me quedo en casa" aunque esto suponga pagar por unos servicios privados, adelantando unos pasos que quizás no debiéramos adelantar, ¿cómo sabemos que no nos estamos equivocando?. Cuando uno tiene un problema de salud quiere que se solucione rápido y si es posible sin que ello suponga una gran pérdida económica, pero...como elijo a que especialista ir ¿? El médico de atención primaria es el que posee esa sabiduría tan útil, si es que hace falta, porque muchos de esos problemas pueden solucionarse en este nivel primario, sin derivaciones, haciendo que la calidad asistencial del paciente/usuario/cliente (ya no se como definirlo) sea infinitamente mejor.

Esta demostrado que si se hace uso del sistema de especialidades te harán más pruebas complementarias, muchas de ellas innecesarias y que la iatrogenia causada será mucho mayor. El problema es que se vende (empezando por los profesionales) que el ser especialista médico es mucho mejor "donde va a parar" a ser ESPECIALISTA de medicina de atención primaria, es decir médico de familia. Internet y la amplia gama de información disponible ha hecho que el usuario se sienta muy capaz ante la toma de decisiones sobre como gestionar su salud. Esto en cierta forma es bueno, porque atrás dejamos el paternalismo que se vendía antes y se abre paso a una nueva forma de entender la relación médico-paciente/usuario/cliente, pero como en todo, hay que tener mesura.

Si un sistema quiere ser sostenible es fundamental que la base este construida con especialistas en atención primaria. Como ya escribí haces unos días, el sistema en sí claro que puede ser sostenible, solo se tiene que recaudar lo legalmente recaudable para financiar la sanidad pública, pero otro punto fundamental es como distribuir estos recursos económicos para hacer sostenible un sistema con una carga de enfermedad cada vez mayor " aumento enfermedades crónicas" debido al cambio etario entre otros motivos.

Una atención primaria en la que confíe la gente debe estar centrada en la persona y no en la enfermedad, puesto que una de las carencias que tiene el sistema es la despersonalización y el sentimiento de sentirte un número más en una larga fila de procesos asistenciales. Si los profesionales de la medicina primaria acercan de una forma comprensible este modelo al ciudadano, cuando una persona tenga un problema, lo primero que pensará será "quién mejor que mi medico de familia para resolver mi problema". En este gráfico publicado en el informe sobre la salud en el mundo 2008 (OMS) podemos ver como una atención primaria centrada en la persona hace que la relación con el médico sea más duradera, y que la asistencia tenga una continuidad en el tiempo y no sea meramente episódica. El término médico de cabecera sería muy apropiado para definir esta idea que no es nueva, pero que está en el olvido.






Cuando los profesionales tienen la confianza de los ciudadanos en una comunidad, puede empezar a trabajarse la promoción y la prevención en salud, que no es que haga el sistema más barato, es más, posiblemente cuanto más prevención tengamos más caro nos saldrá a todos los ciudadanos el sistema, pero al final lo que nos interesa es aumentar la esperanza de vida con la calidad máxima posible. La salud es cara, por supuesto, pero que hay más importante que esto¿?.


En definitiva, la sostenibilidad es posible, y la atención primaria como puerta de entrada hace que esta sostenibilidad sea aún más real, el problema es la falta de credibilidad en muchas ocasiones, no siendo cumpla de nadie y de todos. Creo que un punto importante de mejora sería el aumento en el tiempo de visita y haría que la confianza entre el médico y el paciente aumentara dando paso a una credibilidad mayor, que haría disminuir las derivaciones o el uso de especialistas privados, mejorando la salud de la población.


Nuria López
@nunu_l

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